La supercosecha de manzana trae como resultado un excedente de sidra.
LA SIDRA.- Después de los problemas derivados por el exceso de manzana, llega otra dificultad: sacar al mercado la cantidad de sidra producida en los lagares asturianos.
La mayoría acaban de cerrar la temporada de mayado y confían en que el consumo de sidra, que se ha estancado en los últimos tiempos, crezca y puedan dar salida a toda la sidra elaborada de más.
Lo que sí es seguro es que la nueva sidra vendrá con menos alcohol por efecto de las condiciones climatológicas de este año: la escasez de sol y lluvia provoca que las manzanas, especialmente las variedades más tempranas, contengan menos azúcares.
Jose María Díaz, de Sidra San Juan del Obispo, en Tiñana, reconoce que, como la mayoría de los lagares, se ha producido mucha más sidra este año, casi el doble que el año pasado, aunque le han dado salida a través de destilados y otros derivados.
Por su parte, Fernando Morán, de Sidra Viuda de Corsino, en Nava, remarca que toda la manzana con la que elabora su sidra es 100% asturiana y confía en que la gente se anime a consumirla.
Manuel Riestra, de Sidra Muñiz, Tiñana, confirma que ésta ha sido una buena campaña, aunque la abundancia de fruta no suele ser proporcional a la calidad.
Y José Palacio, de Sidra Viuda de Palacio, en Fozana, considera que ahora que la sidra está en los lagares, hay que aumentar las ventas.
Tino Cortina, presidente del Consejo Regulador de la DOP Sidra de Asturias insiste en abordar el tema del control de las cosechas de forma conjunta, ya que teme que el año que viene se recoja sólo el 20% de la fruta de este año, y se necesita un abastecimiento mínimo para evitar traer manzana de fuera.