El certamen se realizó dentro de las actividades de La Primer Sidre L’Añu que hoy cierra su novena edición con una asistencia de 9.500 personas durante los cuatro días.
LA SIDRA.- 20 personas se inscribieron para participar en la VII Edición de la Sidre Casero Fecho en Maera que se realiza todos años dentro de las actividades que se llevan a cabo dentro de La Primer Sidre L’Añu. Este año el mierense Luis Álvarez se alzó con el primer puesto. Anteriormente ya había participado en el concurso quedando en tercer lugar el año pasado y en 2016 fue también el vencedor. Este 2018 volvió a ser su edición y se impuso a las otras sidras presentadas. En segundo lugar quedó Josemer Oviñana de Uviéu, seguido por Ángel Marcos de Pumarín, Xixón. El cuarto y quinto puesto fueron para José Luis Fernández residente en Pinzales, Xixón (aunque él es de Pola L.laviana) y Ricardo García de Deva, Xixón; respectivamente. El primer puesto obtuvo una pipa de madera de 150 litros. El segundo, un juego de densímetros y termómetro; el tercero 500 corchos de primera calidad. Del primero al quinto lugar recibieron diploma acreditativo. El ganador formará parte del jurado de cata el siguiente año.
El jurado estuvo compuesto por el catador Xuaquín Fernández; Pedro Baldó llagarero de sidra El Duque, Manuel Gutiérrez Busto –presidente del jurado y también colaborador de la revista LA SIDRA–; la catadora Rosa María Valdés; y Juan Carlos Valdés del llagar L’Allume. El escanciado corrió a cargo de Jorge Neagu de La Montera Picona, ganador en la categoría local del Campeonato Oficial de Escanciadores de Asturies en el certamen de Xixón que se realizó en 2017.
El concurso comenzó a la una de la tarde. Primero se realizó una ronda de preselección en la que se escogieron las cinco sidras que iban a pasar a la final. Después de una pausa, el jurado volvió a probar las sidras seleccionadas. Dos empates marcaron la final: para escoger el tercer y el cuarto puesto; y también para escoger el primero y el segundo. Finalmente, Luis Álvarez fue el vencedor. Las catas fueron a ciegas.
De manera que por séptimo año consecutivo se realizó este certamen único en su especialidad. Está orientado a llagareros no profesionales que empleen el sistema tradicional de elaboración de sidra en pipa de madera con el objetivo de dar un impulso al uso de este material para su producción, que va cayendo poco a poco en desuso por la generalización de los depósitos de fibra de vidrio y de acero inoxidable. Además es de los pocos existentes que tiene ámbito asturiano ya que la mayoría de los que se celebran, están limitados al concejo en el que se convocan.
Hoy también fue el día en que se realizó una colaboración con ‘30 días en bici’. Dicha asociación hizo un recorrido por la ciudad que terminó en el Muséu del Pueblu d’Asturies. Sus miembros pudieron entrar gratuitamente a la PSLA, y para unirse a su reivindicación, la Fundación Asturies XXI permitió que todas las demás personas que llevasen su bicicleta pudiesen acceder igualmente gratis al Muséu del Pueblu d’Asturies. Así, se puso fin a la IX edición de la PSLA, que este año, a pesar del tiempo, obtuvo una buena asistencia ya que disfrutaron de esta celebración alrededor de 9.500 personas.
(La foto del jurado está en el orden descrito en el segundo párrafo)
