Val de Boides, Pomarina y Solaya fueron las marcas premiadas en las categorías mejor sidra natural, mejor sidra filtrada y mejor sidra espumosa, respectivamente; además Pilar Coque fue nombrada cosechera del año
La Casa de los Hevia en Villaviciosa fue el marco en el que se desarrolló la entrega de premios a las mejores sidras adscritas a la Denominación de Origen Protegida. Un acto que se mantuvo a pesar de las limitaciones generadas por la COVID-19. Cabe mencionar que en ediciones anteriores, esta entrega de galardones formaba parte del llamado ‘Salón de la Sidra de Asturies’, un encuentro que aglutinaba distintas actividades como degustación, armonizajes, catas guiadas e incluso espectáculos musicales o de magia.
Este año las ganadoras fueron: Val de Boides del Llagar Castañón en Villaviciosa como Mejor Sidra Natural Tradicional. Pomarina de Valle, Ballina y Fernández también de Villaviciosa, como Mejor Sidra Natural Filtrada. Y Solaya, del Llagar de Quelo en Tiñana, como Mejor Sidra Natural Espumosa.
“Este premio es de verdad a la mejor sidra de Asturies, porque está elaborada con manzana 100% de esta tierra. Con Val de Boides estoy obteniendo bastantes premios y estoy muy orgulloso del trabajo de todo el equipo de llagar. Vemos que nuestra sidra está siempre en un muy buen nivel y que se mantiene. Esto demuestra que vamos por buen camino y que mantenemos la calidad” dijo a este medio de comunicación, Julián Castañón.
Por su parte, Tano Collada, enólogo de Valle, Ballina y Fernández, explicó sobre Pomarina que es una sidra “fresca y fácil de beber”. “Es un producto que tiene casi todas las características que puede tener una de escanciar, pero que se puede servir en copa sin necesidad de que se tenga que escanciar”, dijo.
Alberto Fanjul, del llagar de Quelo explicó de Solaya: “Intentamos hacer las cosas bien y este premio nos ha dado mucha alegría. Es una sidra natural, fresca, con notas afrutadas que la hacen más redonda. Su burbuja es muy fina. Es una sidra artesanal, se elabora mediante segunda fermentación en botella siguiendo el método champanoise por lo que lleva trabajo, trabajo y trabajo”.
Finalmente Pila Coque dijo sentirse muy honrada por haber sido reconocida como mejor cosechera del año. “El trabajo en el campo, sea de la manzana o de lo que esa, es muy duro. Si tenemos apoyo se sale adelante y si no es muy difícil. Pero somos muy tenaces, ponemos mucho empeño, mucha ilusión y por eso llegamos a conseguir grandes cosas” manifestó.