La CiderCon, organizada por la American Cider Association, reúne a sidreros del continente americano y del mundo en una de las más importantes conferencias mundiales para profesionales de la sidra
Exámenes para alcanzar el título de pommelier, talleres, encuentros sociales y una prueba de la sidra de más de medio centenar de lagares centraron la actividad de la primera jornada de este evento, en el que la Revista LA SIDRA está haciendo contactos con lagareros de este lado de la mar.
Los talleres trataron de cuestiones tan importantes como «El arte y la ciencia de una sidra equillibrada», «Formación para el cumplimiento de la normativa federal», «Márqueting digital para lagares» o «Hábitos clave para la salud financiera de los lagares», ocupando toda la mañana en la formación de los profesionales sidreros.
Seguidamente tuvo lugar una sesión de red de contactos, en la que los participantes en la CiderCon fueron rotando por mesas en función de su intereses, orígenes o trabajos, dando la oportunidad de conocerse entre todos ellos. En la tarde se cellebró un encuentro especialmente pensado para la gente LGBTQ2IA en el que, mientras se disfrutaba de algunas de las mejores sidras de América, se insistió en la importancia de que todo el mundo se sienta comodo y animó a comunicar de inmediato cualquier problema que pudieran padecer por pertenecer a este colectivo. El agradable ambiente de este encuentro fue el previo perfecho para pasar después a la ‘CiderShare’, patrocinada por la empresa de maquinaria Voran, donde más de 50 lagares compartieron su sidra y dieron a conocer su marca.
El día dio mucho de si y aparte de recibir la correspondiente formación y disfrutar del magnifico ambiente sidrero desde LA SIDRA estamos contentos por la cantidad de gente con la que hemos podido contactar y que esperamos animar a venir a visitar Asturies, trayendo su productos a la siguiente edición del SISGA. Cabe destacar el conocimiento que en general los tienen americanos sobre la sidra asturiana, de la que hablan como «la sidra más antiguo del mundo», anhelando aprender más sobre nosotros, labor a la que hemos colaborado con gusto.