El festival intercéltico se llevará a cabo del 3 al 12 de agosto
Esta vez sí. Asturies volverá a contar con un pabellón propio en el principal festival intercéltico a nivel mundial. Durante más de 10 días se llevarán a cabo en Lorient diferentes espectáculos, exhibiciones, muestras, mercados artesanales y por supuesto conciertos de primer nivel con más de 4 mil 500 músicos y que se espera que los asistentes superen los 750 mil.
El Festival Intercéltico de Lorient abarca todas las formas musicales de los países celtas, canciones milenarias para el folk, el rock o el jazz, a través de las obras en un espacio creativo y cultural. La presencia de músicos de diferentes culturas es un símbolo de identidad abierta al mundo y en constante movimiento. Una cultura que mezcla música, artes visuales, danza, historia, literatura y gastronomía Lorient se abre así al mundo, en la expresión del cosmopolitismo celta que ofrece. “Es un intercambio de culturas que surge, muchas veces, de las personas que van a pie de calle a trabajar. Esa gente realiza un verdadero intercambio, se generan y fortalecen amistades, aprenden nuevas lenguas, comparten historias… El festival te envuelve” asegura Jesús Adrián Rodríguez Álvarez, encargado del pabellón asturiano.
Según señala el encargado del Pabellón, éste mostrará en el Festival Interceltico de Lorient la riqueza y el patrimonio cultural y gastronómico asturiano. “Nuestro objetivo será recrear un ambiente festivo de pueblo asturiano. El Pabellón se vivirá en tres etapas. Desde el mediodía hasta las 15:30 de la tarde, será el momento de las comidas. Doce mesas estarán dispuestas desde el fondo de la carpa hasta el escenario. Y por la noche, hasta las 22:30 horas se podrá comer. La tarde será es más tranquila, con música suave y tradicional. El objetivo es que los asistentes se relajen durante el descanso que da el Festival en torno a un postre dulce o un café. Por la noche, quitamos las mesas para crear otro ambiente, se verá como una verdadera fiesta de pueblo asturiano con grandes músicos que sabrán cómo compartir su cultura con los turistas del festival”.
Más información en el próximo ejemplar de LA SIDRA.