En 2005, «Vila» y su mujer, Carolina, dieron un giro a su vida y abrieron este negocio, en pleno corazón de Pravia, en el que, a base de una cocina tradicional y vanguardista, se pueden degustar los mejores productos asturianos o comprarlos para llevar
LA SIDRA.- Este chigre-tienda familiar, adaptado al siglo XXI y ubicado en pleno corazón de Pravia, nació en 2005 de la mano de José Luis Vilariño, «Vila», y su mujer, Carolina Álvarez –a los que se les sumó, posteriormente, su hijo Andrés–, que decidieron dar un giro radical a su vida y apostar por la hostelería.
La aventura les salió de maravilla y ese pequeño negocio inicial, en el que se podían degustar una gran variedad de productos asturianos, especialmente quesos, o comprarlos para llevar, fue evolucionando hasta una cocina tradicional con un toque vanguardista. Eso sí, sin perder su esencia, sacándole el máximo rendimiento a lo mejor de la gastronomía asturiana.
Sus elaboraciones no dejan indiferentes a los comensales que apuran el pan para rebañar el plato, saboreando sus espectaculares albóndigas de atún rojo o su cachopo vegano, elegido, este año, como el Mejor del Mundo de la categoría, hecho con una seta portobello rellena de jamón de gochu astur celta, besos del Rey Silo y cebolla confitada con salsa de trufa y patatas panaderas, sin olvidarnos de su variedad de tortos de harina de maíz. Para maridar estas delicias, lo mejor, la sidra natural de Herminio o la DOP de Cortina, Villacubera. Su expositor de quesos, embutidos, conservas o legumbres permite a los clientes vivir una experiencia gastronómica en su propia casa.